Este proverbios es acerca de cuándo Dios nos ha estado hablando a nosotros y nos hemos hecho oídos sordos, es decir cuando no hemos querido escuchar su palabra a pesar de tantos mensajes que nos ha estado enviando.
Proverbios 1:24 Por cuanto llamé, y no quisisteis oír, Extendí mi mano, y no hubo quien atendiese
Esto me hace recordar muchísimo a los profetas que siempre tenía una palabra de parte de Dios para su pueblo, pero estas personas en la mayoría de veces ellos fueron muy duros de corazón y jamás decidieron escuchar su palabra.
En estas imágenes cristianas de proverbios ahora les he presentado uno muy bonito iniciando el libro, podemos encontrarlo y podemos considerarlo como un mensaje de parte de Dios a cada uno de nosotros los seres humanos.
Ahora el aprendizaje que podemos tomar de esto es que cuando él nos esté hablando tenemos que poder escuchar y por supuesto en el mejor de los casos tenemos que obedecer, Dios tiene un plan trazado para cada uno de nosotros. Y lo mejor que podemos hacer sin lugar a dudas es buscar de cada día de nuestra vida.